Mujeres en ciencia: Gabriela Muñoz

Fotografía tomada de: https://bit.ly/2ViOcNg

POR LIA RODRÍGUEZ GÓMEZ

En esta segunda edición de la revista +Ciencia, decidimos enfocarnos en cómo nos está afectando la crisis climática desde diferentes puntos de vista. En los demás artículos encontrarán críticas, propuestas y explicaciones, pero en esta sección —que es dedicada a darle visibilidad a mujeres que se trabajan a la ciencia— tenemos el placer de hablar de la Doctora en Ciencias Ambientales, Gabriela Muñoz Meléndez.

Nacida el 9 de junio de 1967 en Matías Romero, Oaxaca, de padre veracruzano y madre oaxaqueña, Gabriela pasó sus primeros años viajando con su familia.Eventualmente se asentaron en Xalapa, Veracruz, donde pasaría el resto de su infancia. Desde muy pequeña se vio atraída por la ciencia; a sus cuatro años le gustaba subirse a un árbol con flores rosáceas y contar hasta cien en secreto, pues la abstracción y los números siempre llamaron su atención. Su padre murió cuando tenía once años, por lo que su madre y sus hermanas cuidaron de ella y la apoyaron incondicionalmente. Socorro, su hermana mayor, incluso estimuló su curiosidad académica al enseñarle las declinaciones del latín antes de que ella supiera leer en español. A los seis años le regalaron un juego de química que impulsó su curiosidad hacia la ciencia y definió el camino de su carrera.

Gabriela estudió Ingeniería Química en la Universidad Veracruzana. Entre las dificultades que experimentó fue el prejuicio de que las mujeres no tienen la misma capacidad que los hombres para la abstracción. Las mujeres en las prácticas profesionales solían ser enviadas a los laboratorios más que a las líneas de producción porque su integridad física podía ser comprometida en ciertos lugares, además de que algunas personas se rehusaban a acatar instrucciones de una mujer. Sin embargo, después de sus experiencias en campo comprendió que su forma de contribuir es más introspectiva, por lo que decidió dedicarse principalmente a la academia.

Estaba considerando dedicarse a la Física cuando decidió hacer su maestría en Ciencias Nucleares en la UNAM. Se mudó a la Ciudad de México (en ese entonces Distrito Federal) y consiguió un trabajo de medio tiempo analizando muestras en un laboratorio bajo contrato entre la Facultad de Química y el Departamento de Ecología del Distrito Federal. La experiencia la hizo replantear sus prioridades y encontró un nuevo campo de estudio en las Ciencias Ambientales. Continuó ese trabajo y su maestría de medio tiempo durante cinco años y siguió con su doctorado en The Imperial College London. En Londres, se metió de oyente a clases de Filosofía de la Ciencia e Historia de la Ciencia, donde expandió su forma de pensar y ver su campo bajo una nueva luz gracias a lecturas que nunca había tenido oportunidad de conocer en la licenciatura. Se quedó alrededor de quince años en Inglaterra y regresó a México hace once años.
Desde entonces, reside en Tijuana, Baja California, y ha trabajado en El Colegio de la Frontera Norte, en donde es directora del Departamento de Estudios Urbanos y del Medio Ambiente, sus intereses de investigación se mueven en torno a complejidad Ambiental en Energía, Cambio Climático, Agua y Calidad del Aire. En el 2012, desarrolló los perfiles energéticos 2020/2040 de Baja California para el Gobierno del Estado. Entre el 2016- 2017 pasó su año sabático en la Universidad
de Standford, California, analizando el nexo agua-energía; por ejemplo los impactos socio-ambientales y políticos de la transferencia e importación de gas natural a plantas estadounidenses establecidas en Baja California para producir energía eléctrica y exportarla a California. A través de la energía comenzó a explorar las conexiones con agua, calidad del aire y migración, entre otros. Actualmente está dirigiendo una tesis en el doctorado de Estudios de migración que aborda la migración por conflictos socioambientales. Y la delineación de derechos al agua en comunidades indígenas en el Doctorado de Cienicas Sociales. Sus planes a futuro son seguir asesorando a estudiantes de maestría y doctorado escribir publicaciones incluidas de divulgación sobre la transición energética de México.
Gabriela Muñoz Meléndez es una gran mujer que ha dedicado su vida a la ciencia. Esperamos que con este pequeño artículo no sólo celebremos su brillante carrera sino que sirva de inspiración para las niñas y mujeres que sienten interés por la ciencia y aún no se animan a explorar ese camino. La
doctora Muñoz —durante la entrevista que le hicimos— dice que el camino del conocimiento siempre nos va a estar cuestionando de manera profunda; por lo tanto, tenemos que detenernos a pensar qué queremos hacer realmente y confiar en lo que creemos y sentimos. Todos podemos hacer ciencia, sólo es cuestión de tenernos confianza.